Zapatero pregona por todo el país que la gente lo vote; quiere conseguir “una mayoría más amplia para no depender de nadie”. Esas palabras, si tenemos en cuenta que ha pactado con cualquiera que tenga a mano, suenan muy bien. Al menos a los terroristas no los tiene en cuenta, aunque a día de hoy tampoco ha dicho que no vaya a pactar con ellos, como toda España espera y como ha prometido hacer.
Yo, que soy muy mal pensada, al ver estas declaraciones, se me ha ocurrido que el guapetón de ZP se encuentra con el agua al cuello y no le queda más remedio que pedir “la mayoría absoluta” para que la gente lo vote en masa, sin escatimar en mentiras y artimañas. Lo mismo que ocurrió en las municipales en un lugar de León “de cuyo nombre no quiero acordarme…” Son ellos mismos los que saben que no tienen nada nuevo que ofrecer, que la gente que los apoyó las pasadas elecciones les dará la espalda al ver los errores de su mandato y algo tienen que hacer.
Desde que la Pepiño´s Factory se ha quedado sin ideas y no graban vídeos cutres, sólo queda apelar a la buena fe de los españoles con esa carita de niño de comunión que nos brinda nuestro presidente cada vez que se asoma a la pequeña pantalla. Sin duda otro apaño más, pero ni los rostros de Rubalcaba (uno que no tiene espejo, que dice que Rajoy tiene mala cara), ni de La Vega, ni de Blanco, ni Solbes, ni ninguno de ellos aunque enumerara toda la lista socialista, servirían para dar ese mensaje que está intentando darnos Zp aprovechando que estamos en estas fiestas tan entrañables en las que la percepción visual sufre algunas modificaciones.
Al colarnos las imágenes entre los anuncios del turrón, el efecto es mucho mayor. En unas fechas en las que incluso nuestros mayores enemigos comparten mesa y mantel con nosotros, ¿cómo no vamos a creer las promesas de salen de una boca con tanto encanto?, esos ojos que parece que nos invitan a adentrarnos en ellos y compartir sus pensamientos. Insisto en que yo a este hombre lo veo más como galán de culebrón que como presidente del Gobierno; es demasiado guapo.
Los socialistas saben que la gente en estas fechas está muy sensiblona y nos bombardean con las imágenes que hagan mella en nuestros sentimientos, para pedirnos que todos los votemos. Necesitan los votos de todos los españoles para no depender de nadie, lo malo es que cada vez los españoles somos más listos y desconfiamos de las buenas promesas que algunos políticos ávidos de poder nos hacen, porque sabemos que nos están engañando con la mejor de sus Zonrizaz.
Mis mejores deseos de felicidad para todos mis amigos virtuales y visitantes del blog. Espero que en estos 366 días se hagan realidad todos vuestros deseos. Yo me beberé una copa de champán a vuestra salud -con la otra brindará alguien muy especial- y en cuanto empiece el nuevo año, os seguiré contando mis deliberaciones políticas.
