jueves, 20 de agosto de 2009

La libertad del fumador

Imagen de http://mcrueda.blogspot.com/2008/06/mitos-y-realidades-sobre-el-tabaco.html

Yo no fumo.
En mi casa nadie fuma. En mi grupo de amigos tengo fumadores y no fumadores. No me molesta el tabaco y, si alguna vez me ha molestado digo a la persona que me echa el humo, de buenas maneras que aparte el cigarro para el otro lado y nunca he tenido que discutir ni enfrentarme a nadie por este tema. Pienso que en esta sociedad, TODOS tenemos derecho a vivir y ser libres y lo que está haciendo este gobierno, me parece todo menos libertad e igualdad –por mucho que ellos pregonen lo contrario-.
No contentos con poner patas arriba sus propias leyes y tildar de apestados a los españoles fumadores que gracias a esta famosa ley, se han tenido que meter en los servicios para echar un pitillo y salir a las calles a llenar las aceras de colillas, han vuelto a la carga porque aquello de que los bares elegirían si su local era para fumadores o espacios sin humo, se lo han saltando a la torera, no cejan en su empeño de seguir con su dictadura particular y nos sorprenden en plenas vacaciones con la noticia de que "La sociedad está madura para una prohibición del tabaco en lugares públicos"; alegando que “unas 55.000 personas mueren al año por el tabaco en España”.
Tal vez si la ministra de sanidad se preocupara un poco más de conseguir esas vacunas que hacen falta para combatir la gripe A, que tan en vilo nos tiene a los españoles y un poco menos en coartar nuestra libertad, serían algo más socialistas de lo que están siendo y un poco menos dictadores acerca de lo que ellos dicen odiar. ¿Dónde quedó la libertad del ser humano de decidir lo que quiere hacer con su vida? ¿Y la del fumador de fumarse un cigarrillo en un bar siempre que el dueño se lo permita?, ¿Por qué no prohíben también las carnes rojas que son causantes de tantos infartos?, ¿Por qué no prohíben los coches que son los que provocan a diario tantos accidentes de tráfico, en lugar de llenar las arcas a base de multas? Parece ser que la única preocupación de nuestro gobierno es que los españoles no piensen, se dejen guiar por sus mandatos y no se mueran, de nada.

lunes, 10 de agosto de 2009

¿Seguridad o recaudación?

Imagen de comunidad.terra.es
Para unos el mes de agosto es sinónimo de vacaciones, de playa y de chiringuitos de verano en los que calmar la sed y hacer vida social con aquellos amigos que no vemos desde el pasado año. Para otros, agosto significa más trabajo y no, no me refiero a los vigilantes de la playa. -Me refiero a los leoneses que trabajan en el centro nacional de tratamiento de denuncias automatizadas con que nos ha obsequiado nuestro paisano Zetapé (para que no digamos que no hace nada por León)-. Aquí se gestionan al año un millón y medio de denuncias. Ahora que la DGT duplicará la vigilancia en las carreteras españolas se duplicará también el trabajo de estos mensajeros que nunca son bien recibidos.
De ese modo, supongo que se atiborrarán nuestras carreteras de radares para que nadie se escape sin contribuir al llenado de las arcas públicas –que es lo que más necesitamos en estos momentos de crisis económica, aunque la publicidad nos intente hacer creer que es por nuestra seguridad-. Si en lugar de ponernos radares, policías y cámaras que nos vigilen las 24 horas del día se buscara la seguridad arreglando las carreteras y eliminando los puntos negros, tal vez los accidentes disminuirían y los conductores no nos sentiríamos como delincuentes cada vez que una misiva de este tipo se cuela en nuestro buzón, aunque hubiera que buscar otro modo de financiación.
Sin embargo, acostumbrados como estamos a que se manipule hasta nuestros pensamientos más íntimos, se nos hace difícil creer que una sobresaturación de vigilancia en las carreteras hará disminuir el número de accidentes en las carreteras secundarias, mientras que empiezan a colocar en las autopistas. ¿Por qué no se plantean la posibilidad de pensar en que los accidentes también son provocados por otras causas, muchas veces ajenas al propio conductor y a su índice de velocidad?

sábado, 8 de agosto de 2009

Familias y "familias"...

Los que ya tenemos algunos años y siempre hemos conocido la familia de toda la vida, nos resulta un poco extraño el hecho de que haya nuevas formas de concebirla tales como dos padres, dos madres u otro tipo de familias que cierto cineasta, de repente, propaga como las más IN. Sin embargo, me considero moderna como la que más y soy capaz de aceptar distintas uniones dentro de una misma familia sin que ello afecte a la salud psíquica de los niños que, no en todos los casos está garantizada.
Aún a riesgo de ser criticada desde los rincones más progresistas que se asoman a esta ventana, rompo una lanza a favor de la familia tradicional y tacho de anómala cualquier otra forma de componer la unidad familiar. De todos modos, cada cual mande en su casa y se monte la película a su manera. Lo que ya no me parece ni medio normal es que un sujeto más o menos aplaudido por su público de dudoso gusto, se permita el lujo de autoproclamarse “Dios a pesar de ser ateo”. Paradojas de algunos que, de repente e inmersos en una vorágine de famosillerío muy superior al que le correspondería por sus méritos, intentan protagonizar una situación que no les pertenece.
Parece ser que la Zeja da mucho juego. Unos resurgen del olvido para volver a saltar a las listas de éxitos, otros renuevan contrato en un sillón demasiado grande para sus virtudes, otros se creen dioses e intentan desbancar a quien corresponde en el afán de renovar una sociedad que no está preparada para según qué moderneZes.

© PdL Editores 2007