lunes, 28 de diciembre de 2009

El ramo leonés

Imagen de Emgorio12

Acabo de llegar de León y de deleitarme con la visita a una exposición organizada por el Ayuntamiento de León, sobre el ramo leonés. Se trata de una tradición leonesa de la época medieval que estaba a punto de desaparecer y se está recuperando. No es que yo sea muy dada a las tradiciones, pero me parece que el ramo leonés merece un reconocimiento por parte de los leoneses que presumimos de serlo.
El ramo consiste en un armazón de madera del que cuelgan diversos ornamentos, dependiendo del lugar en el que se coloque y de la zona de la que proceda. Generalmente suelen ser similares en todas las comarcas leonesas, ya que están decorados con cintas, velas y puntillas de las que cuelgan los dulces típicos de la zona –rosquillas suelen ser los dulces más comunes- aunque también pueden llevar productos de la tierra, tales como flores, frutas, pimientos etc.
Este ramo, decorado por las mozas, se ofrecía a la Virgen en la Misa del Gallo -aunque en algunos pueblos se procesiona en romerías y otras fiestas locales a lo largo del año-. En todos los casos, el ramo constituye una ofrenda y su simbología es más religiosa de lo que muchos tradicionalistas y aconfesionales quisieran, ya que siempre va acompañado de ornamentos de origen rural y cánticos de origen religioso.
Parece ser que el típico -y casi en desuso- ramo, está cobrando fuerza para seguir adornando las fiestas leonesas y traspasando fronteras. Sale de los pueblos y aldeas para instalarse en instituciones, escaparates y casas particulares con el fin de seguir conservando una tradición que nunca debió perderse, como pasa con casi todas las cosas que el abandono y la desidia acaban colocando en el olvido y, cuando ya casi nadie se acuerda de ellas, se vuelven a rescatar para dar a conocer a nuevas generaciones, volver a llenar páginas de diarios, memorias olvidadas y para volver a ser blanco de las nuevas cámaras fotográficas…

martes, 22 de diciembre de 2009

Feliz Navidad a todos


Llega la Navidad y la bandeja de correo electrónico se llena de felicitaciones graciosas y llenas de amor, amistad y los mejores deseos para estos días que se avecinan -y que no siempre destilan tanta sinceridad como aparentemente pregonan-. La Navidad nos cambia a todos un poco y, demasiadas veces nos empapa de cinismo hasta tal punto de repartir besos y abrazos a diestro y siniestro sin hacer distinciones entre amigos amigos y el resto de la gentucilla que nos rodea que muchas veces aprovecha “estas fiestas tan entrañables”…
Llevamos dos meses de bombardeo televisivo y callejero en el que si no nos subimos al carro de la solidaridad y los buenos deseos, parecemos esa especie de “bichos raros” que somos el resto del año. Para tratar de evitar eso, solemos llamar por teléfono a esa persona que en los últimos tiempos nos ha tocado las narices y somos capaces de desear Feliz Navidad a cualquiera que nos encontremos por la calle, sin pararnos a pensar en que en cualquier otra fecha el mayor saludo habría sido un “buenos días” o un “hasta luego”, a lo sumo…
Definitivamente, un año más he de reafirmar mi teoría de que la Navidad nos cambia y nos hace un poco idiotas, no sé si será la lotería (a quien le haya tocado), las burbujas del champán o el espíritu navideño el que nos invade en estas fechas -en las que el atiborramiento y el despilfarro suelen ser las tónicas a seguir- que curiosamente, me sorprendo a mí misma, uniéndome a esa línea que acabo de criticar y reenvío alguno de esos mensajes ñoños llenos de buenos deseos a más contactos de mi lista de los que debiera, a esos que se instalaron un día y no me he detenido a eliminar.
Sin más, a todos mis lectores, amigos y enemigos (que también me leen), os deseo Feliz Navidad. A los amigos y lectores que os encontráis en el grupo de los bien recibidos, os deseo además, que todos vuestros deseos se cumplan y que disfrutéis de este tiempo libre que suponen estas fiestas y aprovecho para mandaros un besote enoooooooorme.
P.D. (Gracias a todos los que me mandáis esos correos, en el fondo me gustan).

viernes, 18 de diciembre de 2009

Nieve en León

Imagen de fondospantalla.info
Saltamos a las primeras páginas de las noticias por tener las temperaturas más bajas de España. La verdad es que en León, ya estamos acostumbrados y no nos sorprende el hecho de levantarnos de la cama, mirar por la ventana y ver un paisaje completamente blanco. De hecho, somos la envidia de muchas provincias por aquello de tener una “blanca Navidad” y nos encanta…
Hacía años que no nevaba tanto hasta el año pasado cuando se cumplió la profecía de las siete lunas, pero recuerdo los inviernos de mi infancia cuando se repetían las escenas que estamos viendo estos días, casi una vez por semana. La nieve siempre invita a jugar y son frecuentes las peleas de bolazos o los típicos muñecos de nieve que adornan el paisaje en su empeño por tener una apariencia idéntica a los que aparecían dibujados en los cuentos o en los personajes de las películas.
Llevamos unos días envueltos en un manto blanco que nos devuelve el espíritu navideño y el entusiasmo por la infancia perdida, aunque también a veces, toca ser realistas y entender que la nieve te obliga a abandonar algunas actividades que tenías planeadas y en cuya agenda no figuraba ella. Pero no hay mal que por bien no venga, más tiempo para estar en casa y preparar la decoración navideña e ir pensando en los menús que compondrán nuestra mesa dentro de unos pocos días.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Libertad

La Libertad. Delacroix
Lo prometido es deuda y mi último post lo terminé diciendo que el tema Libertad era “otro capítulo”. Pues bien, llegó la hora. A finales del anterior régimen, todo el mundo pedía libertad (yo no porque era muy pequeña). Jarcha, ansiosos de libertad, sacaban este tema y rápidamente se convertía en número uno -a pesar de haber sido prohibida en sus inicios- porque los españoles demandaban Libertad. Después de 40 años de dictadura es lo lógico. Hubo niñas en esa época a las que sus padres pusieron el nombre de Libertad.

Yo no pienso dar una clase de historia ni opinar al respecto algo que viví y no recuerdo. La cuestión es que prometí hablar de libertad y aquí estoy, pero el tema que voy a tratar no es la definición de libertad, que todos la sabemos, sino hacer un análisis de la libertad: La libertad de un asesino empieza donde termina la de su víctima. La libertad de alguien que molesta, que insulta, que rompe, que grita… creo que esos temas no los trata la Constitución.
Si unos señores quitan los crucifijos de las aulas (porque la libertad de los no creyentes lo exige), está privando de su libertad a los creyentes, si una ley prohíbe fumar en lugares públicos, está privando de su libertad a los fumadores. Si el artículo 18 dice que todos tenemos derecho a preservar la intimidad, el honor y la propia imagen, no entiendo que pinta cierto SITEL que en cualquier momento nos puede “confundir” con mafiosos, investigarnos y privarnos de la libertad de mantener a salvo nuestra intimidad. La libertad de expresión (la dejaré para otro día, a ver si cambia algo). Y suma y sigue.
Acababa el post de la Constitución diciendo que la libertad era una utopía y, lamentablemente tengo que terminar éste con el mismo soniquete “la libertad es una utopía”, un buen argumento para letras de canciones sesenteras en las que realmente España estaba bastante privada de libertad, aunque… creo que cada día somos más esclavos de todo lo que nos rodea, de la ley, de las nuevas tecnologías, del futuro, del pasado, de nuestras propias emociones, de la hipocresía, del tiempo, de nosotros mismos, del día a día, de las libertades de los demás.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Constitución

Imagen de narros.congreso.es

Todos estamos “enamorados” de ella, pero lamentablemente, cada vez hay más personas que no actúan de acuerdo a sus reglas. Cuando nació la Constitución yo tenía muy pocos años y la verdad, no entendía nada, pero a medida que me fui haciendo mayor empecé a notar las bondades de nuestra Carta Magna y, reitero lo dicho al principio: me encanta. No podía entender cómo vivía la gente sin ella, cómo podían existir personas que actuaban en todo momento según sus propias convicciones y haciendo creer a todos que era lo mejor.
Entendí que a los españoles, lo mejor que nos pudo pasar fue la aprobación de la Constitución para que nuestra forma de Gobierno, se rigiera por las leyes que en ella se incluyen. Lo que está claro es que no todas las leyes se respetan al 100%, pero si presumimos de democráticos y liberales, no podemos ir por la vida de prohibición en prohibición. Alucinaríamos si nos paramos a pensar en la cantidad de veces que somos “dictadores” y pretendemos que todo el que tenemos a nuestro alrededor nos haga los coros y actúe según nuestros deseos…
Si nos fijamos en nuestros propios actos, sólo veremos el lado de la Constitución que más nos interesa y estamos dejando a un lado el derecho de los demás, sin pensar que esa misma Constitución, también tiene derechos para ellos. Por tanto, lamento terminar como empecé: diciendo que a pesar de estar totalmente de acuerdo con ella, muchas veces –demasiadas- nos saltamos sus normas a la torera; sin romper la sonrisa y el talante que nos caracterizan. Seguimos hablando de Libertad, sin pensar en que esa palabra sigue siendo una utopía. Nos creemos libres y estamos más esclavizados que nunca, pero si me permitís, queridos lectores, eso es otro capítulo…

martes, 1 de diciembre de 2009

Desayunos

Imagen de absoluteeuu.com
Procedente del correo electrónico de mi amiga Merce P. me llega este correo que no tiene desperdicio. Me ha llegado esta mañana y he pensado en compartirlo con mis amigos bloggers. Espero que os guste, ya que es un reflejo de la realidad española.


Copipego


Desayunos en el mundo
El americano abre la nevera, saca 2 huevos, saca el beicon, prepara su café, desayuna y se va para el trabajo.
El inglés abre la nevera, saca 2 huevos, los hierve 3 minutos, hace el té, desayuna y se va para el trabajo.
El italiano abre la nevera, saca 2 huevos, panceta, prepara su capuccino , desayuna y se va para el trabajo.
El español abre la nevera y no hay luz..., se rasca los 2 huevos, cierra la nevera, se toma un vaso de agua del grifo y se vuelve a la cama porque no tiene trabajo…




Es un chiste, lo malo es que acabará siendo realidad ya que en muchos hogares españoles es lo que está pasando en estos momentos.
Besos Merce y gracias por estas sonrisas

© PdL Editores 2007