lunes, 16 de agosto de 2010

Viejas y nuevas imágenes

Artículo publicado en Ibañeza.es en mi columna semanal "Letras con eñe"

Muchas imágenes, en nuestra retina, nos han llevado al entorno de la Plaza Mayor desde que tenemos uso de razón. Miles de fotos archivadas en álbumes dejan constancia de los cambios que ha sufrido el corazón de la ciudad, desde que la memoria de los más mayores permite hacer una buena crónica. Distintos arreglos y enfoques, a lo largo de los años, han acompañado a la plaza hasta que a principios del año 2010 se inicia una renovación total de la misma.

Un nuevo aspecto “chato” para la iglesia de Santa María a partir del trágico incendio que sufrió su chapitel en 1894. El nuevo Ayuntamiento dejó otra imagen más moderna de la ciudad en el año 1909 completando esa imagen de la plaza que todos conocemos. La farola de la plaza, aquélla que fue objeto de algunas coplillas sarcásticas, se erguía en el centro de la plaza cual vigía, regulando el tráfico que, por aquel entonces pasaba por la Nacional VI.

“A escasos metros, la piedra que marcaba la distancia desde Madrid: Kilómetro 303”[…]“La juventud desfilaba ante ella en el paseo dominguero”. Allí estaba también el templete que, junto con la farola formaban un escenario festivo. […]“Don Potenciano, al frente de la banda de música, ponía la nota”, con el fin de que “el lugar resultara alegre, acogedor, concurrido”[…] (Manuel Martín Sánchez, La Bañeza de villa a ciudad)

La farola y el templete desaparecían de la Plaza y una fuente luminosa ocupaba su lugar. Eran otros tiempos y la necesidad de darle a la zona más importante de La Bañeza, un aspecto más moderno, trajo lo que hoy muchos añoran: “la seña de identidad”, la fuente que ha sido testigo de tantos momentos únicos para la ciudad era demolida ante la mirada de muchos nostálgicos y otros tantos soñadores, pensando en pasar una página más en la historia bañezana y mirando al futuro con decisión.

Esta nueva plaza, guarda el encanto de siempre, pero muestra una imagen renovada acorde con los tiempos que vivimos y con los bañezanos que disfrutarán de ella. Mayor amplitud, más sitio, más realce para los monumentos que, aunque hace siglos que están en ella y han visto otras estampas, se rejuvenecen ante esta nueva imagen de la ciudad.

Aquellas imágenes sólo quedarán en la mente de algunos nostálgicos y en las fotos que atesoremos en viejas cajas. Ahora la fuente y todas las viejas estampas, dejan paso a otro espacio en el que la vida sigue, donde otras mil y una historias e imágenes irán dejando atrás las que habíamos guardado con tanto mimo, cuando nos parecía que, como dice el poema de Jorge Manrique: “cualquiera tiempo pasado fue mejor”.

4 comentarios:

ZP Nunca Mais dijo...

¿Tú no crees que las farolas que han puesto en la Plaza Mayor no pegan ni con cola? Mira que son feas. Por lo demás nada que objetar, menudo cambio.
Enhorabuena.

Sonia Antonella dijo...

Bueno,la verdad es que no conozco de lo que hablas,hubiera sido interesante acompañar este reportaje con las viejas y nuevas imagenes..,pero, así es la vida,nos vamos renovando...Aquí en Chile ,con cada catástrofe se renuevan las calles.los edificios,algunos patrimonios culturales, con las embestidas de la naturaleza. (terremotos,tsunami,lluvias inesperadas en el desierto,etc,etc


Me gustó tu reflexivo texto.


besitos
soni

Álvaro Tilo dijo...

¿Qué te puedo decir, Mª Ángeles, de La Bañeza? ¿Qué puedo opinar de su plaza, de sus iglesias de sus parques y jardines y de sus farolas?

Tan sólo puedo decir que si trasmiten lo que tú, tan delicadamente sabes transmitir en tus escritos; serán lugares muy agrdables, apacibles y dignos de verse. Así, mientras llega ese día en que conozca tu tierra, sigue siendo esa estupenda embajadora que de ella eres.

Un cordial saludo.

Álvaro Tilo dijo...

Mª Ángeles, aquí te dejo de nuevo, otro comentario.

Me gustaría, tú que eres una buena escritora sensible , te acercaras a un poeta que descubrí no hace muchos años y del que he publicado algún poema en mi blog.

Fue un genial poeta romántico- bohemio de los años 20 del siglo pasado. Su vida es muy azarosa, llena de miserias y dificultades, pero su poesía es única.

Puede que no te guste nada, pero al menos deberías intentarlo, si te parece, con su poema "Orgullo" haciendo mención especial a los dos últimos versos. En cualquier buscador escribes Armando Buscarini, poema “Orgullo” y ya está.

Hace unos pocos días en mi blog, publiqué un poema de él, de los buenos y este fin de semana, pondré el escrito que mandó a Alfonso XIII como testamente cuando ya había vivía en el mundo de sueños irreales que había generado su mente.

Ya me dirás algo.

Publicar este escrito o no hacerlo, es algo que dejo a tu libre decisión.

Un cordial saludo.

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