sábado, 6 de febrero de 2010

Se llama hipocresía…


En León, mi tierra, a estos casos les llamamos hipocresía; Zapatero, también leonés, considera que esto forma parte de su talante y se permite el lujo de leer la biblia sin sentir ningún rubor. Aquella biblia de la que él, según como le venga la ventolera, dice no creer ni compartir; sin embargo, no duda un instante de colocarse la careta de católico practicante y dirigirse al mundo entero, en forma de súplicas y plegarias al más puro estilo santurrón. Evidentemente, a esto en mi pueblo le llamamos hipocresía.
Zapatero, ante la mirada de Obama, dirige sus rezos a Dios -del que no tengo la más mínima duda de que siempre se ha mantenido distante y asegura que no existe- y no se corta ni un pelo para enfundarse en su disfraz y encandilar a los presentes (y los ausentes) con unos rezos que no siente, que no le salen de dentro. Tal vez, alguno o varios de sus asesores le hayan hecho el discurso y él solo ha tenido que utilizar su talento para fingir. Eso ha demostrado en repetidas ocasiones que es su especialidad.
Si España es “fundamentalmente cristiana”, lo que no entiendo es que venga un político y se cargue de un plumazo los símbolos con los que los cristianos nos identificamos. No entiendo que el presidente del Gobierno español vaya a “rezar” con el presidente de los EEUU y no se sonroje ante su auditorio al sincerarse consigo mismo acerca de sus verdaderas creencias. No entiendo, si a él sólo le preocupan los parados, los inmigrantes y los homosexuales, que es lo que el resto de españoles (que afortunadamente no pertenecemos a ninguno de los tres grupos) qué lugar nos corresponde en su plegaria. No lo entiendo, pero estoy casi segura de que la hipocresía es algo así.

3 comentarios:

abuelotellez@gmail.com dijo...

Que razón llevas,tambien en mi Córdoba se le llama igual "hipocresía", parece mentira que en un discurso dirija sus rezos a Dios, que como bien manifiestas se encuentra muy distante de ÉL. Todas tus palabras no tienen ni un solo renglon esperdicio alguno, todas ellas son ciertas y verdaderas.Es verdad que nos duele a cada uno de nosotros que un político de alta esfera mencione la biblia sin quererla comprender.
Un saludo.

El rincón de Chiriveque dijo...

Un paripé en toda regla. No hay ni que darle más vueltas. Un abrazo.

El rincón de Chiriveque dijo...

Un paripé en toda regla. No hay ni que darle más vueltas. Un abrazo.

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