jueves, 17 de abril de 2008

La censura ya no acosa a Lola

Llevaba unos meses acosada por la censura y se me "obligó" a retirar de mi rincón de las historias, un relato en el que todas sus situaciones y personajes son ficticios, debido a que alguien se sintió identificado con la situación de los protagonistas. Esas personas han llegado muy lejos intantando desprestigiarme con acusaciones en la prensa. Utilizan unas palabras que ni siquiera ellos conocen su definición y quieren quedar bien ante la gente en un pueblo en el que nos conocemos todos, después de llevar meses de continua decepción para todo el pueblo.
Llevaba tiempo planteándome ejercer mi derecho como ciudadano español a la libertad de expresión,a causa de unos cambios de actitud en estas personas, pero hoy, día 17 de abril de 2008, en el que "Brad Pitt" me acusa de "despecho", "traición", "cobarde anonimato" "narcisismo", "movida por el vil metal", y algunas perlas más que se encuentran en el Diario de León, he decidido que la historia de Lola se va a publicar entera (1ª y 2ª parte) para que "Mister León, el galán de los galanes por el que las féminas perdemos los papeles" se sienta traicionado por mí, ya que hasta ahora no le había concedido ese privilegio.

5 comentarios:

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

Libertad siempre

Saludos

Caballero ZP dijo...

Pues ya sabes, cuando la gente se siente identificada o aludida y no les gusta, es que algo tendrán que esconder.
Tú sigue adelante con todo lo que quieras expresar, tienes todo mi apoyo y el de mucha gente.
Saludos

tiberio dijo...

interesante historia.de haberla publicado antes el galan como tu dices no te hubiera llevado a la prensa.tu reputacion esta de sobra reconocida por los que te queremos y apoyamos.animo y cuentanos la tercera parte porque seguro que la hay.saludos.

Anónimo dijo...

La libertad de expresión por encima de todo, no desfallezcas.

Mª Ángeles dijo...

Gracias Miguel, Caballero Zp, Tiberio y Eureka por vuestro apoyo.
Intentaré ser fiel a mis principios y publicar todo aquello que me apetezca, sin hacer caso de falsos amigos que pretendan ponerme cortapisas.
Gracias a los cuatro por vuestras palabras.

© PdL Editores 2007